La entrevista de la desvergüenza.

La semana pasada, en la víspera del partido de vuelta de la eliminatoria de la Copa del Rey, pudimos asistir a uno de los desatinos periodísticos más groseros que se recuerdan. Me estoy refiriendo a la lamentable entrevista que realizaron dos sujetos que se hacen llamar "profesionales de la información" al presidente del Real Madrid, D.Florentino Pérez durante los informativos del mediodía de la cadena Cuatro (del grupo Prisa). En ella, se le faltó al respeto desde el momento mismo en que entró a plató, tuteándole de forma pretenciosa, faltando a la verdad en numerosas ocasiones e insinuando que es una especie de "mafiosillo de medio pelo" al ironizar uno de estos individuos con el hecho de amarrar al otro a la silla a modo de mordaza, como si Florentino ahora fuera el verdugo y ellos las víctimas.
En ella además, se dijeron medias verdades que pretendían ser dogmas de fe y que sólo tenían el objetivo de desprestigiar y desestabilizar al actual presidente del club. La más indigna de ellas fue la acusación que Lama le dirigió, diciendo que en su anterior etapa como presidente ganó 3 títulos de 18. Jamás escuché una manipulación tan burda por parte de este personaje. Si contamos que Florentino estuvo 6 años de presidente y que ganó dos ligas y una champions pues puede tener algo de razón. Pero lo grave y lo que hace tan indignas sus palabras es que obviara títulos ganados por el Real Madrid en aquella época y de la importancia de la Supercopa de España, la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental. Claro, cuando las gana el "dream-team" son supertítulos, pero cuando las gana el mejor equipo del S.XX no se toman en cuenta.
El resto de la entrevista discurrió por los mismos derroteros, entre acusaciones e intentos de humillación a una persona a la que apenas dejaron defenderse.
Esa misma tarde las líneas de la emisora cuatro se colapsaron, ante el aluvión de llamadas de aficionados (no sólo del Real Madrid) que pedían algún tipo de sanción para estos dos "estafadores" que se dicen periodistas, y que desde luego han perdido miles de telespectadores por aquella nefasta actuación.

Posteriormente, y ante la indignación generalizada de los madridistas (que son mayoría en España le pese a quien le pese) se vieron obligados a "disculparse" a través de un vídeo que a la vez manipula la entrevista original, eliminando de ella los elementos más ofensivos y objeto de polémica. Vamos, de vergüenza.