El pasado sábado, el RM dio un paso atrás en la lucha por la Liga, dejándose 3 puntos en un campo hóstil y ante un rival que mostró una inusual fiereza en los primeros minutos y férrea solidez defensiva durante el resto del partido. Si el Athletic jugase así toda la temporada no pasaría sus ya típicas penurias por la permanencia; sin embargo ya se sabe que siempre los pequeños se alían contra el más fuerte y ganándole al Madrid muchos equipos salvan la temporada.
El equipo de Pellegrini salió dormido y de ello se aprovecharon los vascos. Luego, buscamos con ahínco la portería de Iraizoz pero sin resultado. El partido no tiene más lecturas: perdimos (inmerecidamente) por la mínima y el liderato se aleja. Sin embargo, sí que tiene lectura la ola de derrotismo que asola algunos foros (en el sentido más amplio de la palabra). Ya se dice que la Liga está perdida, que no se pueden escapar puntos en el Reyno ni en San Mamés, que el centro del campo no sirve, que no tenemos un killer…salvo esto último (pues nadie duda de que ni CR9, ni B11 ni H20 son delanteros centros natos del corte de Ibrahimovic o el gran Van Nistelrooy) todo lo demás no dejan de ser juicios prematuros que además suelen ser erróneos (acuérdense, sin ir más lejos, de la Trigésima Liga conseguida por el equipo entrenado por Fabio Capello). En Mayo hablaremos, y esperemos por el bien del madridismo, no tener que lamentarnos y acabar pagando por los puntos que inmerecidamente dejamos en campos como el de Bilbao.
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